El verano pasado llegamos a la segunda
planta y, como nuestro nombre se empeña en recordar, llegamos al
mar. El azul inundó las habitaciones del segundo piso y traspasó
las colchas, las camas y los muebles de la 201, 202, 203 ….
Ahora os mostramos ese azul, no es
cielo, marino, tinta, ni tan siquiera añil, es azul …
mediterráneo, el nuestro.
Esperamos que os guste el camino que va
llevando nuestra reforma.
Un abrazo a todos.